La frecuencia con la que debe reunirse con su contador público depende de sus necesidades específicas y de la naturaleza de su negocio. Para la mayoría de las pequeñas y medianas empresas, es recomendable tener reuniones mensuales o trimestrales para revisar la contabilidad y la situación fiscal. Durante la temporada de impuestos o cuando se avecinan plazos importantes, es posible que necesite reunirse con mayor frecuencia. Mantener una comunicación regular y fluida con su contador puede ayudar a asegurar que todas las obligaciones fiscales y financieras se cumplan de manera oportuna y eficiente.

– Comprobantes de ingresos (facturas, recibos)
– Registros de gastos deducibles (facturas, recibos)
– Estados de cuenta bancarios y de tarjetas de crédito
– Documentación de activos y pasivos-
– Información sobre nómina y empleados (si aplica)
– Declaraciones fiscales de años anteriores
– Documentación de inversiones y otras fuentes de ingresos
– Cualquier otra documentación específica que su contador le solicite para asegurar una presentación completa y precisa.

El costo de los servicios de un contador público puede variar ampliamente dependiendo de varios factores, como la complejidad de los servicios requeridos, el tamaño de su negocio, la experiencia del contador y la frecuencia de los servicios.

Es un servicio integral en materia de administración y contabilidad con el fin de equilibrar las finanzas internas de sus clientes para aspirar gradualmente a mayores crecimientos empresariales.

Independientemente del tamaño y del giro de las empresas, el no contar con una voz asesora confiable en materia de contabilidad, puede llevar al estancamiento financiero o peor aún, a un status de inoperancia con gastos desproporcionados, caos administrativo, omisión y deficiencia de procesos contables, fuga de capital, falta de pagos, falta de liquidez, multas y sanciones fiscales, así como pérdidas constantes en lugar de ganancias.

Un despacho contable y fiscal ofrece una amplia gama de servicios que incluyen la contabilidad general, elaboración de estados financieros, presentación de declaraciones fiscales, asesoría en materia tributaria, planificación fiscal y más.

Contratar un despacho contable y fiscal es fundamental para garantizar el cumplimiento de las obligaciones fiscales y contables de tu empresa, así como para optimizar la gestión financiera y minimizar riesgos de errores o incumplimientos que puedan derivar en sanciones o multas.